La Paz , 28 jul (ABI).- El presidente Evo Morales reveló este lunes tener información sobre el desactivado Grupo de F-10 y el financiamiento que recibía de Estados Unidos.
"Gracias a algunos oficiales de las Fuerzas Armadas tengo una información de primera mano, sobre lo que era antes por ejemplo, el F-10 sobre todo el comportamiento, la participación de Estados Unidos", puntualizó.
Explicó que a raíz de la información que le proporcionaron algunos suboficiales, sargentos y coroneles sabe qué acciones tenía que tomar el F-10.
Destacó la sinceridad de estos militares que le informaron en reserva sobre el F-10 y el uso de los gastos reservados. El Jefe de Estado aprovechó para dejar en claro que en el Alto Mando de las Fuerzas Armadas no hay gastos reservados como en el pasado.
Al referirse a otros militares, dijo que, "por una disciplina institucional algunos no me informan, tienen todo el derecho, pero otros reservadamente me informan cómo se manejaban los gastos reservados".
Los militares que pasaron por ex Grupo Antiterrorista F-10, como el Sbtte. Georges Peter Nava Zurita, son acusados del presunto acto de terrorismo en la población de Yacuiba, el 21 de junio del presente.
De acuerdo a los antecedentes, la F 10 "Chachapuma" tiene una historia particular en las Fuerzas Armadas de la Nación. Fue la heredera de la GRIE (Grupo de Reacción Inmediata del Ejército), organizada y entrenada durante el Gobierno de Hugo Banzer (ADN, hoy Podemos), cuyo vicepresidente fue Jorge Tuto Quiroga.
Desintegrado el GRIE, el Grupo Militar de la Embajada de Estados Unidos en Bolivia organizó, entrenó, armó y financió a la Fuerza 10, esta vez, integrada por selectos oficiales del Ejército, Fuerza Naval, Fuerza Aérea y Policía.
El Gobierno del entonces presidente de la República , Eduardo Rodríguez Veltzé, y el comandante del Ejército, Gral. Marcelo Antezana, utilizaron a la F 10 para entregar 28 misiles chinos, que formaban parte de la única defensa aérea disuasiva de Bolivia, al Grupo Militar de Estados Unidos en La Paz.
El Gobierno de Evo Morales relevó a los jefes militares que controlaban a la F-10 y Estados Unidos reaccionó con una "descertificación a la fuerza conjunta anti-terrorista", lo cual significaba que retiraba toda ayuda militar a esa fuerza y otras, además de intentar amenazar con llevarse sus armas
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