lunes, 31 de marzo de 2008

Editorial


Homologaciones

Aunque distintas en el espacio, tiempo y forma, las agresiones derechistas contra los gobiernos de Bolivia y Argentina signan en el Cono Sur las confrontaciones actuales entre el imperialismo y sus socios locales, y las políticas de unidad continental de Nuestra América. Los proyectos “autonomistas” y de ataque directo al gobierno de Evo Morales Ayma que enarbola la burguesía cruceña vinculada fundamentalmente a la agroexportación y los recursos naturales- tierra se vinculan, casualmente, con un paro agropecuario que, desde hace mas de 15 días, intenta golpear al gobierno de Cristina de Kirchner y a los sectores populares, quienes sufren el desabastecimiento producido por los cortes de ruta provocados por el lock out patronal.
Sin sentar un paralelo entre ambos gobiernos- en transición al socialismo y basado en el Capitalismo de Estado, la nacionalización de recursos naturales y la redistribución agraria como motor de la acumulación originaria, el uno, y de recreación de un denominado “capitalismo nacional” basado en empresas locales y sumado al fomento de la exportación a través de medidas que tienden a una sobrevalorización del dólar, y su contrapartida, la retención, el otro - la reacción derechista y proimperialista no se fija en diferencias cuando ataca. Y es porque sabe que la redistribución del ingreso, la concentración y centralización proletaria, el poder obrero- campesino- originario y popular en ciernes, la unidad continental para hacerle frente a las pretensiones imperiales y la conformación de un bloque histórico que contenga a los obreros, originarios-campesinos y sectores medios en un proyecto de liberación nacional desembocará tarde o temprano en la concreción de una sociedad sin explotadores ni explotados, ni marginados ni oprimidos.

El nuevo “día después” de los ricos

Si bien en el año 2004, y debido a un secuestro y asesinato que movilizó a miles de buenas y piadosas personas hacia la histórica Plaza de Mayo para pedir mano dura ante la “inseguridad” que las propias fuerzas policiales y los amplios resabios del parapolicialismo y paramilitarismo dictatorial provocaban, se inició el “día después” del 24 de marzo- aniversario del nefasto golpe militar de 1976-, para los sectores reaccionarios de la Capital Federal y el país, en este 2008, cuatro años mas tarde, el “día después” todavía continúa.
Una gran burguesía agraria que, históricamente y al igual que la “boliviana”, vivió de espaldas al país real tanto en lo económico cuanto en lo social y lo cultural; que le importó siempre más el mercado internacional que el mercado interno- por cuanto vende a altos precios internacionales y paga sus trabajadores en bajos precios locales-, que prefirió la blancura europea y yanqui a la tez morena de los millones de habitantes que hicieron y hacen el país con su trabajo, y que se dedicó mas a las farras y ágapes que a menguar el sufrimiento de quienes eran sus mandados, inició el 12 de marzo un “paro” en el mejor momento de su vida económica- lease sus ganancias- de los últimos veinte años.
Si algo los une a los “parantes”, especuladores, “autonomistas” que pretenden voltear a los gobiernos de Evo y Cristina de Kirchner, es:
- su capacidad, como grandes burgueses terratenientes agroexportadores, para alinear detrás de sus planteos reaccionarios y antipopulares a sectores importantes de las pequeño-burguesías, tanto urbanas como rurales, que sin quererlo o directamente saltando hacia el abismo los acompañan en sus aventuras golpistas.
- su inmensa codicia y visión de futuro, que los obliga a vislumbrar, detrás de medidas tibias como las retenciones a los productores rurales o un capitalismo de Estado impulsor del desarrollo industrial, el gérmen de sus futuras desgracias como grandes capitalistas.
- la táctica del desabastecimiento ciudadano- a través de la especulación, el agio, el bloqueo empresarial de caminos, la exportación alimentaria, etc.- con el fin de manipular y alinear al desprevenido citadino con sus objetivos golpistas.
- su racismo sin cortapisas y su odio visceral a los gobiernos de Cuba y Venezuela, a la par de Ecuador, Nicaragua o cualquier otro que haya saltado la cerca imperialista y se dirija hacia un horizonte libertario y antiimperialista.
- la promoción de sus actividades por parte de la mayoría de los medios de información, de los cuales son dueños y a los cuales controlan, que intentan incidir en la población alimentando la idea- fuerza de que la confrontación es entre “gobiernos” y “sociedad civil”, y no entre explotados y explotadores. Así, en el caso de Argentina, los defensores del gobierno serían los “piqueteros K”, y los representantes de la burguesía agraria y sus seguidores “la gente”. Y en Bolivia los “masistas”, “indios”, “caras de llama” contra los civilizados “ciudadanos”.

Perspectivas

En el marco de este nuevo 24 de marzo revanchista, que convoca a todos los reaccionarios de América latina y otras partes del mundo, se realizó en Rosario el denominado Encuentro por la Libertad … de oprimir y esquilmar. Toda la fauna gorila- entre ella el faccioso Aznar y Roger Noriega, gusano americano, ex subsecretario de Estado de Asuntos Hemisféricos de EE.UU.- se dio cita allí para despotricar contra los gobiernos populares del área, alabar la injusticia social y la explotación y montar una provocación en cuanto a la celebración que este año se hará ante el 80 aniversario del nacimiento del Che Guevara en esta ciudad santafesina. Como se sabe, no faltaron los “bolivianos” – el Senador Oscar Ortiz, Tuto Quiroga y Reyes Villa, entre otros- que vinieron a pedir, entre bambalinas, el apoyo de Argentina en cuanto al ilegal proceso de fragmentación del país que la burguesía oriental intenta consumar el 4 de mayo próximo. Y tampoco los “argentinos”, como Mauricio Macri, quien agasajó el sábado a Noriega, Aznar y Tuto Quiroga en el Palacio Legislativo porteño mientras un centenar de policías con pistolas lanzagases, carros de asalto y escudos los protegían de la “turba” multinacional- argentinos, bolivianos, etc- que los acechaba…
Los pueblos de Nuestra América estamos alertados de estos embates reaccionarios. Afincados a la tierra y los frutos que otros le arrancan con su trabajo, a los grandes negocios especulativo- financieros, a las compraventa de armas y otras minucias, estos parásitos intentan nuevamente regresar a las reglas de juego puras del capitalismo: la explotación, el saqueo y el genocidio.
La unidad continental hace frente ya a sus pretensiones.
Porque, como dijera Evita, “con sangre o sin sangre la raza maldita de oligarcas y explotadores morirá en este siglo”, sabremos llegar, todos juntos, caiga quien caiga y cueste lo que cueste, a la liberación nacional y social, a la dignidad cultural y de clase, al socialismo.


Jorge Luis Ubertalli

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